Design Sprint, el primer paso para definir un producto exitoso

Alexia Ulate
Creativería
Published in
5 min readNov 26, 2019

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La incertidumbre siempre está presente al iniciar un nuevo proyecto: sabemos que solo una parte de las probabilidades está a nuestro favor, tener una buena idea es solamente el inicio de un largo camino. Mantener esa idea viva y hacerla crecer depende en gran parte del enfoque o proceso que se utilice para desarrollarla. Si empleamos el enfoque correcto y un proceso de calidad, podemos impulsar esa idea para que no muera en el camino y llegue a tener éxito.

¿Qué es el Design Sprint?

Design sprint es una herramienta de investigación y diseño que nos permite obtener resultados tangibles para resolver diferentes retos. Es una metodología ágil, que nos ayuda a desechar ideas equivocadas y a encontrar el mejor camino a seguir. Se utilizan la colaboración, el prototipado y las pruebas de usuario como herramientas.

Se compone por una serie de actividades programadas para ser realizadas en apenas 4 días, que se resumen de la siguiente forma:

  • Día 1: Definir el reto y producir soluciones.
  • Día 2: Votar por la mejor solución y realizar el storyboard.
  • Día 3: Elaborar el prototipo.
  • Día 4: Realizar pruebas con usuario reales.

Este proceso permite resolver dudas o cuestionamientos críticos para el negocio de la mano de los usuarios, reduciendo el tiempo de entrega y la duración general de los proyectos.

Pero… ¿qué es lo que hace que el Design Sprint sea importante? ¿Cuál es su objetivo?

Generalmente las empresas enfrentan sus proyectos con procesos sumamente complejos, que se constituyen de diferentes etapas y se traducen en meses de trabajo para seguir un ciclo como el siguiente:

La duración de este tipo de procesos hace que el equipo pierda el norte y después de tantos días de trabajo el entusiasmo también tiende a disminuir. El design sprint tiene como objetivo lograr un proceso igual de efectivo en menos tiempo y menos etapas, de forma que tengamos un ciclo más corto y constante que nos lleve a:

Gracias a este ciclo que se plantea, el design sprint se considera una herramienta ágil, que permite validar rápido y a bajo costo. Se involucra a los usuarios finales dentro del proceso, por lo que en períodos cortos de tiempo obtenemos resultados validados.

¿Qué debes saber antes de un sprint?

Al ser un proceso relativamente nuevo, es de esperar que al inicio se tengan cuestionamientos y expectativas varias respecto a las actividades y los resultados que se pueden obtener.

  1. ¿Es necesario tener conocimientos previos sobre diseño o desarrollo web?

La utilidad del sprint se basa en compartir ideas y conocimiento respecto a un problema específico, por lo que sin importar el perfil profesional, todos los participantes pueden dar a conocer sus opiniones y hacer sus aportes durante las diferentes actividades.

2. ¿Es necesario contar con personas de diferentes perfiles profesionales durante las sesiones?

Al involucrar profesionales de distintas áreas, la información que se obtiene es de mayor valor para el proyecto, uno de los puntos centrales del sprint es involucrar a todas las personas en la toma de decisiones, por lo que cada decisión tomada se basa no solo en el criterio individual sino en el criterio del equipo.

La colaboración y la confianza que se desarrollan durante los días del sprint, permiten a los equipos asumir los desafíos y la toma de decisiones como uno solo, ya que todos los miembros se encuentran alineados respecto al objetivo principal.

3. ¿Es una dinámica innovadora?

Sí, es innovador, por lo que se requiere una actitud dispuesta al cambio para aceptar las diferentes actividades que se realizan ya que pueden ser un poco diferentes a lo que históricamente se lleva acabo durante un proceso de definición para un producto.

4. ¿El design sprint se termina con un producto finalizado al 100%?

El Design Sprint nos permite descartar ideas que no cumplan con lo requerido, encontrar un bien rumbo para el proyecto que se desea realizar, visualizar posibles errores y problemas potenciales con anticipación, así como validar todas las hipótesis que existen alrededor del proyecto. Aún cuando no sea el 100% del producto final o una solución terminada, el Design Sprint nos permite plantear un excelente punto de partida y una muy buena base para cualquier proyecto.

¿Qué se necesita para llevar acabo un sprint?

  • Una necesidad o un problema que se desee resolver.
  • Buena actitud: Se deben enfrentar los cambios que plantean las actividades respecto al proceso que se maneja actualmente.
  • Disposición: Se deben aceptar los resultados que brindan las actividades.
  • Comprensión: No todas las ideas van a ser aceptadas y no todas las hipótesis van a dar resultados positivos.
  • Disponibilidad: Se debe estar presente en al menos dos días del sprint.
  • Equipo: Un grupo de personas involucradas o cercanas a la necesidad o problema, dispuesto a compartir ideas.

Después de un acercamiento a los puntos más relevantes del sprint, podemos concluir con la pregunta:

¿Es realista y accesible aplicar un Design Sprint?

Como sabemos, antes de empezar cualquier proyecto vale la pena conocer a que nos enfrentamos. El sprint no nos da el resultado final, pero sí nos muestra el camino a seguir más acertado. Nos ayuda a descartar aquellas ideas que no tienen tanto futuro y nos brinda información real respecto a los futuros usuarios.

No se necesita tener un gran presupuesto o un prototipo avanzado, simplemente se necesitan ideas y un equipo preparado para colaborar, por lo que sí, es realista y está al alcance de todos.

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